La ruina de la memoria: el padre


Josué Isaac Muñoz Núñez

La película El Padre 2020 (The Father) dirigida por el director y escritor francés Florian Zeller protagonizada por Anthony Hopkins y Olivia Colman muestra lo falible que es la memoria.

La película trata de Anthony, un anciano que tiene un problema degenerativo. La enfermedad no es dicha pero se supone. La historia está filmada de tal modo que nosotros sintamos lo que es perder la memoria.

Aunque podemos decir que es un problema de la vejez, sabemos que la memoria no es perfecta. Muchas veces confundimos los nombres de personas, libros o películas. Así como fechas y cantidades. Por lo que la película nos habla de lo laberíntico que es la memoria y sus vicios de olvidar y confundir cosas.

Se juega con las escenas, vestuarios, actores y locaciones para darnos la sensación de confusión. En una escena vemos a Anthony hablar con su hija. Ella tiene el cabello corto y usa una vestimenta azul. Después, en otra escena, llega otra mujer que tiene el cabello largo y una blusa roja. El protagonista está tan sorprendido como nosotros, “¿quién es esta mujer?” se pregunta y nosotros también. Resulta que es su hija.

Lo que recordamos no es tal como lo vivimos. El hoy pronto será un recuerdo con muchas lagunas y errores. Las imágenes de la memoria son inexactas, ambiguas. A lo largo de la película podemos ver cómo la memoria de Anthony va mermando. Confunde fechas, horas, personas, lugares. En un momento dado el espectador se pierde con el protagonista y no se sabe qué pasó antes y qué después.

La vida de Anthony está rota, es fragmentaria, pues nada es seguro para él. Imaginemos vivir sin la certeza de saber qué día es hoy o quién es la persona que saludamos por las mañanas al despertar. Todos hemos olvidado algo y nos sentimos vulnerables al no recordar eso que se nos borró de la memoria. Ahora esto trasladémoslo a lo que resta de nuestra vida. El caos reinaría. El protagonista del filme vive en el caos.

Nosotros como espectadores podemos sobreponernos a esto. Sabemos que es un filme; podemos salir del cine y volver a confiar en nuestra falsa buena memoria. Tal vez algunos lleguen a tener problemas de memoria, tal vez otros no. Pero esta película nos permite conectar con la angustia de las personas que han perdido el hilo de su vida.



Ilustración: Isaías Aravena